domingo, 2 de noviembre de 2014

El Manifiesto humanista 2000 sintetiza en nueve puntos la ética de este movimiento filosófico, citados a continuación de manera textual:
1. La dignidad y autonomía del individuo es el valor central. La ética humanista se compromete a maximizar la libertad de elección, libertad de pensamiento y conciencia, el libre pensamiento y la libre investigación, y el derecho de los individuos a seguir sus propios estilos de vida hasta donde sean capaces y hasta tanto que ello no dañe o perjudique a otros. Esto es especialmente relevante en las sociedades democráticas en donde pueden coexistir una multiplicidad de sistemas alternativos de valores. Por consiguiente los humanistas aprecian la diversidad.
2. La defensa humanista de la autodeterminación no significa que los humanistas acepten como valiosas cualquier clase de conducta por el mero hecho de ser humana. Ni la tolerancia de los distintos estilos de vida implica necesariamente su aprobación. Los humanistas insisten que acompañando al compromiso con una sociedad libre está siempre la necesidad de alcanzar un nivel cualitativo de gusto y distinción. Los humanistas creen que la libertad debe ser ejercitada con responsabilidad. Reconocemos que todos los individuos viven en el seno de comunidades y que algunas acciones son destructivas y están equivocadas.
3. Los filósofos éticos humanistas han defendido una ética de la excelencia (desde Aristóteles y Kant hasta John Stuart Mill, John Dewey, y M.N. Roy). En ellos se hacen patentes la templanza, la moderación, la continencia, el autocontrol. Entre los tópicos de la excelencia se encuentran la capacidad de elegir libremente, la creatividad, el gusto estético, la prudencia en las motivaciones, la racionalidad y una cierta obligación de llevar a su máximo cumplimiento los más altos talentos de cada cual. El humanismo intenta sacar a flote lo mejor de la gente, de manera que todo el mundo pueda tener lo mejor en la vida.
4. El humanismo reconoce nuestras responsabilidades y deudas con los otros. Esto significa que no debemos tratar a los demás seres humanos como meros objetos para nuestra propia satisfacción; debemos considerarlos como personas dignas de igual consideración que nosotros mismos. Los humanistas sostienen que «todos y cada uno de los individuos deberían ser tratados humanamente». Aceptan la Regla de Oro según la cual «no debes tratar a los demás como no quieras que te traten a ti». También aceptan por la misma razón el antiguo mandato de que deberíamos «recibir a los extranjeros dentro de nuestras posibilidades», respetando sus diferencias con nosotros. Dada la multiplicidad actual de credos, todos somos extranjeros —aunque podamos ser amigos— en una comunidad más amplia.
5. Los humanistas creen que las virtudes de la empatía (o buena disposición) y la corrección (o el trato cuidadoso) son esenciales para la conducta ética. Esto implica que deberíamos desarrollar un interés altruista hacia las necesidades e intereses de los demás. Las piedras fundamentales de la conducta moral son las «decencias morales comunes»; es decir, las virtudes morales generales que son ampliamente compartidas por los miembros de la especie humana pertenecientes a las más diversas culturas y religiones: Debemos decir la verdad, cumplir las promesas, ser honestos, sinceros, hacer el bien, ser fiables y confiar, dar muestras de fidelidad, aprecio y gratitud; ser bien pensados, justos y tolerantes; debemos negociar las diferencias razonablemente e intentar ser cooperativos; no debemos herir o injuriar, ni tampoco hacer daño o atemorizar a otras personas. Pese a que los humanistas han hecho llamamientos contra los códigos puritanos represivos, con el mismo énfasis han defendido la responsabilidad moral.
6. En lo más alto de la agenda humanista figura la necesidad de proporcionar educación moral a los niños y a los jóvenes, al objeto de desarrollar el carácter y fomentar el aprecio por las decencias morales universales, así como para garantizar el progreso moral y la capacidad de razonamiento moral.
7. Los humanistas recomiendan que usemos la razón para fundamentar nuestros juicios éticos. El punto decisivo es que el conocimiento es esencial para formular elecciones éticas. En particular, necesitamos comprometernos en un proceso de deliberación, si estamos por la tarea de solucionar los dilemas morales. Los principios y valores humanos pueden justificarse mejor a la luz de la investigación reflexiva. Cuando existan diferencias, es preciso negociarlas siempre que podamos mediante un diálogo racional.
8. Los humanistas mantienen que deberíamos estar preparados para modificar los principios y los valores éticos a la luz de las realidades que vayan produciéndose y de las expectativas futuras. Necesitamos ciertamente apropiarnos de la mejor sabiduría moral del pasado, pero también desarrollar nuevas soluciones para los dilemas morales, sean viejos o nuevos. Por ejemplo, el debate sobre la eutanasia voluntaria se ha intensificado de manera especial en las sociedades opulentas, porque la tecnología médica nos capacita ahora para prolongar la vida de pacientes terminales que anteriormente habrían muerto. Los humanistas han argumentado a favor del «morir con dignidad» y del derecho de los adultos competentes para rechazar el tratamiento médico, reduciendo así el sufrimiento innecesario, e incluso para acelerar la muerte. También han reconocido la importancia del movimiento hospitalario para facilitar el proceso más deseable. De la misma manera, deberíamos estar preparados para elegir racionalmente entre los nuevos poderes reproductivos que la investigación científica ha hecho posibles —tales como la fertilización in vitro, la maternidad de alquiler, la ingeniería genética, el transplante de órganos y la clonación. No podemos estar mirando atrás, hacia las morales absolutas del pasado para guiarnos en estas cuestiones. Necesitamos respetar la autonomía de la elección.
9. Los humanistas arguyen que deberíamos respetar una ética de principios. Esto significa que el fin no justifica los medios; por el contrario, nuestros fines están modelados por nuestros medios, y hay límites acerca de lo que nos está permitido hacer. Esto es especialmente importante hoy a la luz de las tiranías dictatoriales del siglo XX, en las que determinadas ideologías políticas manipularon comprometidos medios morales con fervor casi religioso para realizar fines visionarios. Somos agudamente conscientes de trágico sufrimiento infligido a millones de personas por quienes estuvieron dispuestos a permitir un gran mal en la prosecución de un supuesto bien mucho mayor.

miércoles, 25 de junio de 2014



La situación económica del país ha requerido decisiones de los gobernantes a hacer leyes para comportamientos que deberían estar implícitos en el ser humano y en la educación que se nos debería presentar en nuestros hogares, en la familia y sobre todo en la sociedad, porque si bien es cierto que se han cometido errores muchos de estos errores han sido por la constante lucha contra idiosincrasia del venezolano que solo busca crecer financieramente y no socialmente, esto supone un cambio de paradigma tanto en la casa del campesino como en la casa del gerente del banco y del presidente de la constructora, que por su educación y el acceso a esta, estará obteniendo las herramientas, tanto sociales como psicológicas, para respetar las leyes pero sobre todo respetarnos nosotros mismos, sabiendo que mis derechos terminan donde comienzan los de mi compatriota, no importa si es un limpia vidrios del semáforo o el jefe de finanzas de una empresa transnacional. 

En esta sentido, se debe señalar la importancia que viene adquiriendo la ética en este modelo de desarrollo que se está construyendo, un modelo basado en una economía, en sus principios de eficiencia y eficacia, donde las decisiones globales que se toman tienen consecuencias inmediatas en la organización de la sociedad, no es solo un discurso político, más bien creemos indispensable poner en práctica una nueva idea, una nueva orientación filosófica y social de la población para poder obtener tan anhelados logros en el crecimiento social del venezolano.

miércoles, 21 de mayo de 2014

Los razones de salud mi acceso a equipos informáticos se ha disminuido al uso solo por cuestiones de estricta urgencia, mas ver cada día la situación del país es saber que se requiere aportar algo de nuestra realidad a los sistemas de comunicación e información en la wep para que determinemos juntos herramientas para evaluar nuestro país a partir de nuestro actuar, en este sentido le cuento un poco mi historia de salud. Hace casi un año sufrí un accidente laboral (que no fue reportado por la empresa donde laboro) solo fue algo superficial mas sin embargo la sensibilidad en el área donde me corte es muy distinta lo que me obliga a no usar el dedo índice izquierdo por dolencias lo que genero que me creciera un Quiste Sinovial (para mayor información: http://www.onmeda.es/enfermedades/ganglion-sintomas-1487-4.html) lo que me llevo a evaluar ciertos aspectos de algunos médicos que he visitado:
Primero que nada cabe la pena resaltar que los ingresos promedios de un médico especialista superan en un 1000 % al ciudadano promedio del país. No creemos entonces saquemos cuentas un médico especialista en el centro de salud del estado tiene un salario básico mensual entre bs. 6.250 y 10.750 luego están sus ingresos por libre ejercicio, un traumatólogo promedio cobra 600 bs. La consulta la cual solo hace 4 días a la semana por que dispone de 1 dia a la semana para realizar sus intervenciones quirúrgicas que tienen como ingreso aprox. Entre bs.5.000 y 10.000 pudiendo realizar hasta 5 intervenciones al día, si este médico ve 10 personas en un día aumenta su riqueza en bs. 6.000 que es un sueldo promedio mensual en tan solo un día, reduzcamos los días de consultas a 3 para darle el beneficio de la duda en cuanto al número de pacientes puesto ellos dicen que nunca va la misma cantidad de pacientes, pero inexplicablemente llegamos a consulta a las 6 de la mañana, el doctor llega a las 8 de la mañana y salimos al medio día, con suerte si el médico no es un destacado doctor de renombre, es decir, a continuación se presentara un pequeño calculo de ingresos en una semana común para un traumatólogo especialista en cirugía de manos:

Habrá días en que solo asistan 5 personas a consulta

 


Ingresos Día 1
Ingresos Día 2
Ingresos Día 3
Ingresos
Día Para Quirófano
Total
Bs. 6.000,00
Bs. 3.000,00
Bs. 9.000,00
Bs. 30.000,00
Añadir leyenda
Bs. 48.000,00
En solo una semana?????

    

Cuanto podría ser este ingreso a largo tiempo?????

48.000,00 X 4
Bs. 192.000,00 Mensual  
Si lo llevamos a términos anuales vamos a volver a darles el beneficio de la duda y le calcularemos solo 10 meses.
192.000,00 X 10= 1.920.000,00 Anual

No hace falta comparar estos ingresos para ver lo desviados que están de su verdadera vocación, como han llevado su profesión al extremo lucrativo, no es de esperarse que obsequien su trabajo pero es seguro que con un costo más accesible podríamos de seguro poder tener mejor atención puesto que creciera este tipo de servicio, es solo cuestión de análisis, y no nos vengan a mentir diciéndonos del alquiler del consultorio y de la secretaria, porque estoy seguro que son incapaces de darles sueldos por arriba del salario mínimo, y mucho menos reconocerles todos y cada uno de los beneficios que merecen.   

Juramento 

"Evocando a Luis Razetti apóstol de la moral médica en Venezuela y en presencia de las autoridades universitarias, más profesores y compañeros de estudio, me comprometo bajo solemne juramento a cumplir los siguientes postulados: 

1) Desempeñaré mi profesión con esmero y dignidad, velando con el máximo respeto por la vida de más semejantes y aún bajo amenaza no empleare más conocimientos para contravenir las leyes de la humanidad. 

2) Profesaré a más maestros el respeto y gratitud que se hayan hecho merecedores e intentaré, con todos los medios a mi alcance, mantenerme permanentemente informado de los avances del conocimiento médico. 

3) No permitiré que la satisfacción intelectual derivada de mi capacidad para identificar y tratar las enfermedades y de contribuir al progreso de la ciencia médica me hagan olvidar los principios humanitarios que rigen nuestra profesión y la consideración prioritaria del paciente como persona. 

4) No intentaré nuevos tratamientos o procedimientos de investigación si los riesgos para el paciente exceden los posibles beneficios, cumpliendo estrictamente las Pautas Internacionales para la Investigación Biomédica en los Seres Humanos. 

5) No permitiré que motivos de lucro interfieran el ejercicio libre e independiente de mi juicio profesional. 

6) Preservaré en absoluto secreto las confidencias que se me hagan durante mi actuación profesional, aún después de la muerte del enfermo. 

7) Mi reverencia por la vida al atender enfermos terminales no colidará con mi obligación fundamental de aliviar el sufrimiento humano. 

8) Mantendré con todas más fuerzas el honor y las nobles tradiciones de la profesión médica y no haré distinción en el ejercicio de más obligaciones ni por adhesión a partido político o posición social. 

9) No estableceré diferencias en mi dedicación y en la calidad de la atención prestada al enfermo, se trate de servicios médicos contratados, de carácter individual o de índole gratuita. 

10) Daré estricto cumplimiento a los principios éticos de nuestra profesión, procurando para los demás aquello que, en circunstancias similares, desearía para mi y para mis seres queridos".

SIN ÉTICA PROFESIONAL NO HAY PATRIA……